Su nombre deriva de la costumbre que hay en ese lugar de pescar un tiburón pequeño de nombre Cazón, en el río que lleva el mismo nombre del municipio. Por otro lado, el “De Herrera” se debe en honor al militar y político que ocupó en tres ocasiones el Presidente de México, José Joaquín de Herrera.
En esta zona, en el siglo XV, se encontraba dominado por los mexicas, más tarde en 1780 el lugar perteneció a los totonacas.
Anteriormente este municipio pertenecía a Papantla, pero el 12 de diciembre de 1939 se eleva a villa.
Su clima es cálido regular, con una temperatura promedio de 25 grados Celsius y una precipitación pluvial media anual de 2 mil mm.
Su flora es de selva alta perennifolia donde se pueden encontrar especies como el ojite, chicozapote, cedro, chaca, orejón, uvero, ceiba, higuerón, jobo, anona, coyol, palma, espino y nopal.
Sobre su fauna, se encuentran poblaciones de mamíferos silvestres como conejos, mapaches, tlacuaches, tejones, armadillo y coyotes.
Su riqueza se debe a su vegetación donde sobresalen las maderas preciosas.
El danzón, música tropical y son Jarocho es la música representativa de este municipio, la cual se interpreta por guitarra, los violines, la vihuela y el contrabajo.
Sus bailes son los típicos de la Huasteca Veracruzana, y tienen como significado preservar las tradiciones.
Del 16 al 23 de junio celebran la creación del Municipio Libre y su feria tradicional; el 22 de marzo llevan a cabo su carnaval y el 1 y 2 de noviembre celebran la fiesta de Todos Santos y los Fieles Difuntos.
Sobre su gastronomía, se encuentran platillos deliciosos como camarones al mojo de ajo, caldo de robalo, manos de cangrejo, pulpos en su tinta, mole, adobo y chileajo de cerdo.
Sus artesanías son elaboradas con recursos marinos como conchas, los caracoles, los erizos y los caracoles.
De igual manera su atractivo turístico es el mar, con playas como Azul, Boquitas, Sur, Chaparrales, donde se ofrecen paseos de la ribera del Río y en lancha por los manglares.